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Migdonio DeDiego Moreno

OPINIÓN

¿Por qué usted en el negocio atiende de mal genio al público?


Por MigdonioDediego Moreno

Señor (a), cuando alguien llega al negocio, oficina, empresa o trabajo que usted atiende, esa persona rara vez lo hace con el fin de mendigar algo; por lo general, esa persona llega con el propósito de comprar, pagar o pedir alguna información; también puede llegar solicitando algún beneficio o derecho que le es propio; así las cosas: ¿Por qué usted recibe al cliente utilizando mal modo y con agrio genio?; usted debe cambiar esa mala manera de trabajar y de atender al público que merece el mejor y mayor respeto durante la relación y trato de la actividad presente; así sea en la venta de empanadas, buñuelos, arepas, negocio importante o informal; por favor, no discuta ni se enfrente agriamente al cliente, usuario o persona que acude en busca de la atención suya, evite usted ese estilo ordinario y grosero cuando  atiende al público, use la educación y sea cortés.
La persona o cliente que se acerca a un negocio, oficina o empresa, solicitando un servicio, debe ser bien atendida mediante la cortesía, el respeto y las buenas maneras de parte del trabajador, empleado o dueño del negocio.  Si usted no puede realizar el trabajo con una actitud positiva, renuncie y váyase a la casa y póngase a cocinar para no causarle mal al negocio que atiende.
Si usted individualmente no se comprende, menos podrá comprender a los demás; por esto, debe matricularse en el SENA y hacer un curso de Relaciones Interpersonales, a fin de ayudarse en aspectos de Comprensión Humana y así poder mejorar su mal comportamiento ante el cliente, esto le permitirá convertirse en una persona o trabajador (a) útil y ejemplar, quien hará brillar la imagen del negocio, oficina, empresa o centro comercial que estaba haciendo desdibujar con su mala atención; entidades éstas en donde usted se gana el dinero para el pan cotidiano familiar y personal, por favor, sea una persona formal.
Sea amable y deje atrás la ordinariez con que usted se afana para atender al cliente que llega al hotel, banco, hospital, restaurante, consultorio médico, panadería, supermercado, droguería, oficina pastoral, tienda, peluquería, bar, almacén, venta ambulante, teatro, taxi, venta informal, etc., a donde sea, procure ser una persona formal, también en el bingo familiar y comunal, galerías de acopio, en todos, usted debe comportarse como una persona educada y de trato equilibrado para hacerse querer de los demás; no se deje conducir por los estados de neura; ya que ésta es una enemiga del ser humano.  No sea déspota en el trato con los semejantes, siendo formal, el negocio crecerá y brillará su imagen hasta la eternidad.
Siempre procure dominarse, quien se controla así mismo, controlará el mundo, no sea contestatario (a) ante el cliente; a éste, siempre otórguele la razón, a fin de ser cortés y no hacerle daño al negocio que atiende o representa.  Ante el público, siempre debe mostrar una cara alegre y amable y atender bien al cliente para que éste no denigre el negocio; usted no debe luchar para defraudar el negocio o la institución donde trabaja o la dirige como jefe, gerente, empleado o asistente, la educación no es ordinaria ni pelea con la gente, máxime si se trata de un cliente del negocio que usted está atendiendo.  Si los irracionales merecen respeto y consideración, mucho más el ser humano como cliente de la actividad que usted desempeña; a ésta, protéjala y hágala brillar en pro de la humanidad que no ha querido valorar, sea humilde y deje a un lado la prepotencia.
La grandeza suya consiste: En saber reconocer, con alegría y cortesía, su propia pequeñez, para mantener así unidos los eslabones de la cadena humana, ofreciendo respeto, compromiso, lealtad, eficacia, eficiencia y cumplimiento laboral durante el deber confiado en pro de los anhelos e intereses generales de la sociedad, así se podrá alcanzar la Grandeza del Ser Humano, sin buscarla y sin darse cuenta que la ha construido con su buena forma de actuar para atender la responsabilidad que laboralmente le otorgaron. Compórtese bien para que sienta “el ruido de las cosas al caer”; así podrá ayudar a lograr la misión y los objetivos generales para el crecimiento de la empresa pública o privada que a usted le dio la oportunidad para trabajar.