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Migdonio DeDiego Moreno

OPINIÓN

Ha nacido un virus humano que ataca a la sociedad

Por: Migdonio Dediego Moreno

Silenciosamente ha nacido un virus humano que viene atacando a los marcos sociales de las familias, las empresas y las instituciones; se trata de un virus de mayores dimensiones y daños que el Papiloma Humano; ese pernicioso virus es: el Individualismo, que se ha filtrado en los seres humanos para crear estadios de insolidaridad, indiferencia, egoísmo, deshumanización, odios, rencores, venganzas, animadversiones, daños irreparables, irrespeto, apatías, todo esto conlleva a que como no es conmigo, nada me interesa, por lo cual debo hacerme “el de la vista gorda” ante las afugias que sufre el vecino o la comunidad, el amigo, el familiar, el compañero de labor, la empresa, la institución, la ciudad, el transeúnte o el propio yo.  El Individualismo hace producir una ceguera que atrofia el cerebro y el alma humana, dejando al ser en completa parálisis para actuar ante las exigencias comunes y sociales del diario acontecer.
¿De qué vientre pudo venir o haber nacido el virus del Individualismo?. Posiblemente nació del seno de las insatisfacciones hogareñas, debido a las dificultades cotidianas para vivir; también ha podido tener su ancestro en la mala formación impartida en los hogares por diversos padres que han desatendido su obligación de darles a sus hijos firme orientación y condiciones óptimas para un adecuado desarrollo de la personalidad.  Otros padres han errado en la formación del ser humano por el inhibitorio flagelo que sufren debido a la desigualdad social que los aísla, los constriñe y los limita para cumplir con las diarias obligaciones deparadas por el modernismo y la globalización contemporánea.
De todas maneras, cuanto antes es necesario adoptar urgentes métodos y oportunas estrategias que permiten ayudar al equilibrio del seno de los hogares que deben aplicar una oportuna formación y orientación a los hijos para evitar su desajuste, frenando así el perverso virus del Individualismo, el cual es galopante y está causando demasiados daños en el marco de las relaciones sociales, al imprimir la insolidaridad y la desunión social, con egoísmo que derrumba la esencia de la hermandad vecinal que debemos proteger y conservar para vivir mejor en las familias y comunidades humanas de nuestra nacionalidad.
Es de urgente deber gubernamental la adopción de una metodológica socialización que oriente y proteja a los hogares colombianos, respecto a la formación del ser humano, hoy despreciado por el tener; alimentador de la indiferencia, la cual es constructora del Individualismo, que es una sarna que se debe curar, no deja avanzar y cierra los caminos de la redención social que todos debemos disfrutar en familias y comunidades sonrientes, ausentes del virus individualista que destruye el bien común y debilita el desarrollo de la humana vida social.